Un modelo que pone al estudiante en el centro
El aprendizaje autónomo propone que cada estudiante asuma un rol activo en su proceso formativo.
A través de recorridos digitales con objetivos, etapas y criterios visibles desde el inicio,
los estudiantes aprenden a planificar, avanzar y autoevaluarse, mientras los docentes
acompañan con retroalimentación breve, visible y accionable.
Una experiencia guiada, flexible y personalizada
Objetivos claros y visibles
Cada estudiante conoce desde el inicio qué se espera de él y cómo evaluará su progreso.
Feedback
constante
La plataforma permite intercambios ágiles y centrados en la mejora continua.
Autogestión con acompañamiento
Los docentes y tutores monitorean el tablero de avance y ofrecen intervenciones precisas.
Datos
para decidir
La trazabilidad de avances y entregas permite mejorar la gestión pedagógica e institucional.
Estudiante
Gestiona su ritmo de aprendizaje, se autoevalúa y produce evidencias de su progreso.
Docente / Tutor
Diseña los recorridos, brinda feedback y guía a cada estudiante con estrategias diferenciadas.
Institución
Define el marco común, los tiempos y las políticas que garantizan coherencia y escalabilidad.
Nuevos roles para una educación más activa
Beneficios para estudiantes, docentes e instituciones
Mayor motivación y autonomía del estudiantado.
Personalización real sin perder el marco común.
Eficiencia docente: menos tareas repetitivas, más acompañamiento de calidad.
Datos e indicadores para mejorar decisiones pedagógicas.
Escalabilidad institucional adaptable a distintos contextos y niveles.
El aprendizaje autónomo no significa aprender solo, sino aprender a aprender.
Equipo Pedagógico Ticmas
El aprendizaje autónomo transforma el aula y empodera a quienes aprenden y enseñan
Una nueva forma de aprender, más consciente, activa y significativa.
